Pedro era un niño muy travieso. Cuando iba al colegio sus profesores siempre le dicían a sus padres que era imposible que se estuviese callado. Lo que más le gustaba era jugar al fútbol con sus amigos y jugar a la consola por las noches.
Cuando llegó al instituto la cosa fue de mal en peor; en su clase había un montón de chicos y chicas muy extraños que solo querían pasárselo bien y eso a él la molaba.
Pronto llegaron los exámenes de Diciembre pero aquello no había por donde cogerlo. Suspendió un montón de asignaturas así que cuando llegó a casa no sabía como decírselo a sus padres. Primero lo intento con su madre pero no fue capaz y luego fue a junto su padre, pero tampoco lo consiguió. No sabía que hacer así que decidió marcharse al parque para poder recapacitar y poder pensar un poquito.
Ana C.D
Pedro se dirigía al parque con la cabeza gacha, pues sabía que tarde o temprano, se
tendría que enfrentar a sus padres y decirle la verdad. Pero aún podía hacer algo, a Pedro, se le daba muy bien imitar a las cosas y los objetos, por que no intentar, falsificar sus malas notas por unas más buenas...si, era una buena idea. Pedro corrió a un lugar seguro del parque, donde nadie le viera. No estaba muy seguro de si sería capaz, pero al menos lo intentaría. Cogió un boli y, muy cuidadosamente, convirtió los 3 en 8, y los 1 en 10.Y al fin, acabó. En sus notas solo se veían notables y sobresalientes. Pedro estaba muy feliz por su logro, pero de repente, de la nada, salió una cosa pequeña que se dirigía hacia el. Al estar a menos de medio metro de Pedro, le dijo:
-Así que falsificando notas, no Pedro?-le gritó el enanito.
-Quién...quién eres tu?-tartamudeó Pedro.
-Jajaja, que quién soy yo, yo soy tu conciencia y, me llamo Héctor. Te advierto de las cosas malas que haces, como esto por ejemplo-dijo poniendo el papel de las notas, delante de los ojos de Pedro.
Pedro se quedó callado, pues no sabía que decir.
-De verdad, nunca pensé que serías capaz de esto-siguió Héctor.
Pedro lo escuchaba con rabia, ahora que lo había conseguido, va y aparece este enano y se lo estropea todo. BINGO!A Pedro se le había ocurrido una idea, aún conservaba un tarro de cristal, que se encontrara hace tiempo en el parque. Mientras Héctor, hablaba y hablaba y hablaba, Pedro, sacó el tarro de su mochila y, atrapó a Héctor. Este chillaba, gritaba, pero nada, Pedro se levantó decidido y, tiró el tarro al río. Luego, como si no hubiera pasado nada, se volvió a casa, para enseñarle a sus padres, las excelentes notas falsificadas.
María D.P.
El incidente con su conciencia no le volvió a preocupar a Pedro, se preguntaba a menudo si se podía vivir sin concinecia; pero, la verdad le daba igual tenerla o no tenerla. Los padres de Pedro le habían felicitado por sus notas y le habían dicho que podía ir de vacaciones con sus amigos a Pequín. Pedro se emocionó mucho y enseguida empezó los preparativos para el viaje, el viernes saldrían rumbo a Pequín.
Por fin llegó el día tan esperado. El avión salía al mediodía y el muchacho salió a dar una vuelta, donde aprovechó para comprar los regalos, a lo mejor en China no le daba tiempo, o simplemente le daba pereza, el pensaba pasarse la mayor parte del tiempo en el jacuzzi o la piscina.
El avión salió a al hora esperada, el vuelo duraría doce horas.Cuando llevaban dos horas en el avión, éste empezó a caerse y a subir, y volvía caer... ¿Qué demonios estaba pasando?
De repente, delante de Pedro, apareció el enanito riéndose:
-Ja, ja ¿pensabas que te ibas a librar de tu conciencia tan fácilmente?- tení una sonrisa maliciosa en la cara que a Pedro le daba mucha rabia, pero... ¿Qué iba a hacer él?
Pedro estaba muy nervioso notaba como el sudor le caía por la cara...
Victoria D.T.
Pedro, sin pensar. hizo lo primero que se le ocurrió: saco su navaja multiusos y se la estampó en al enatito en todo el torso. Héctor, el enanito desapareció como la mantequilla, es decir, derritiéndose, también soltaba por la boca un líquido negro (parecido a chapapote).
Y, de repente, todo fue como si no hubiese ocurrido el avión volvía a volar sin hacer vira vueltas, y las personas ya no gritaban como si fueran a dar a luz. Para era como si nada hubiese ocurrido. Después de que pasase la conmoción por la aparición del enanito Pedro se tranquilizó y volvió a pensar en sus vacaiones, iba a hacer tantas cosas...
Jennifer D.
y pedro pensó que si cojia él el mando del avión llegaría antes, y así fue, pedrito cogió, y fue asta la sala de mandos, cargado con una pistola y al piloto le metió una bala en todo el pescuezo, pero derrepente apareció el hermano de jackie chan y evitó que matara al copiloto, jackie, le metió una patada boladora en la parte lateral dela cabeza, dejándolo inconsciente por media hora, lo justo para sujetarlo con una cuerda en el asiento del avión, y cuándo se despertó no recordaba nada...
CRECHO
martes, 23 de marzo de 2010
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